Síguenos en Twitter Siguenos en Facebook Siguenos en Linkedin Siguenos en YouTube

Ads 468x60px

Publicaciones más visitadas

jueves, 16 de mayo de 2013

La importancia de enseñar a compartir a nuestros hijos


por Albert Giménez y Aida Marzo (Psicología, intervención psicoeducativa)

Compartir debe ser una de las tareas formativas más importantes de la educación de nuestros hijos. Enseñar a compartir evitará que no desarrollen comportamientos egoístas y avariciosos en un futuro.

Ir transmitiéndoles valores como la generosidad, y educarles para que sepan desprenderse de lo material o para que sepan ponerse en el lugar de los demás. De esta forma, estaremos contribuyendo a que nuestros hijos sean mejores personas.

Para ello debemos enseñarles desde muy temprana edad; aunque debemos entender y respetar su correcto desarrollo.

Los niños pequeños son egocéntricos de manera natural, y eso no es ni bueno ni malo, simplemente es lo normal,  el niño conoce el mundo según una sola perspectiva, la de él mismo. Esto significa que no son capaces de ponerse en el lugar de los demás, todo el mundo gira alrededor suyo. El egocentrismo es una etapa normal del desarrollo que los niños deben superar para convivir en armonía.

En los dos primeros años de vida, los niños no tienen ningún sentido de la propiedad, no distinguen cuando algo les pertenece o no. Si llevan tiempo jugando con un juguete y se familiarizan con él no entienden que pueda ser de otro. De igual forma, cuando prestan algo, piensan que no les va a ser devuelto, que lo van a perder.  Por ello, es importante a esta edad no obligarles a compartir ni prestar sus juguetes sin antes consultarles. Debemos respetar sus sentimientos, de lo contrario, se podría convertir en un niño inseguro y más egoísta a la hora de compartir sus juguetes. 

A los dos o tres años empiezan a estar preparados para entender el concepto de propiedad. Un error muy común que cometen los padres es decirles en ese momento a los niños que todo es de todos. Esto puede ser contraproducente, ya que los niños deben aprender que las cosas sí tienen un dueño, y que cuando se quiere algo, hay que pedir permiso. Y además, deben entender que el propietario puede decir que no, ya que hay cosas que se comparten y otras que no.
Si hacemos esto correctamente en esta etapa, el niño aprenderá los valores sociales que rigen nuestra sociedad y su buena convivencia. Aprenderán a ser respetuosos, considerados, a pedir permiso, etc.

A esta edad empiezan a jugar con otros niños, pero todavía no están preparados para compartir sus juguetes. Es importante que los padres sepan cuáles son aquellos juguetes que más usan para reservárselos cuando el niño esté solo; y los juguetes que no les importa prestar para compartirlos con otros niños.

A partir de los cuatro o cinco años, los niños ya están preparados para entender los beneficios que les aportará el compartir con otros niños. Entenderán que compartir sus objetos les ayuda a tener amigos, y a divertirse más con ellos.
Es importante que los padres enseñen a sus hijos las ventajas que tiene que compartir.
Se debe enseñar que las cosas se prestan de forma desinteresada para que su amigo esté contento y que esto a su vez le hará sentirse bien a él. 


Consejos

1-Explicarles los beneficios
Hay que explicarles a los niños las cosas buenas que aporta compartir, y lo felices que hacen a otros niños.

2-No debemos obligarles
El niño no debe compartir porque los padres se lo digamos, él mismo debe comprender lo bueno que es, y qué beneficios le aporta para él y los otros niños.
Hay que respetar sus sentimientos, y su ritmo de aprendizaje.

3- Refuerzo positivo
Cuando el niño haga alguna acción de compartir, hay que elogiarle.  Es muy importante reforzar los momentos cuando se ofrezca a compartir un juguete.
Por ejemplo: "Me gustó la forma en que compartiste el juguete con Mario. Te debes de sentir muy orgulloso."

4- El niño debe saberlo con tiempo
Los niños deben saber con antelación que cosas serán para compartir, y que las debe de tratar bien para que otros niños disfruten igual que él.

5- Actividades y juegos que impliquen compartir
Los padres pueden proponer juegos en los que conviene compartir y jugar en grupo.

6-Dar ejemplo a nuestros hijos
Ya sea por imitación o porque los padres somos un referente, todo lo que hagamos lo querrán copiar. La imitación es una técnica muy importante para el desarrollo del aprendizaje. Debemos por tanto dar ejemplo a nuestros hijos;  que observen cómo sus padres son personas generosas en el trato diario con otras personas y cómo se comportan con los demás siendo amables y generosos, no desperdiciemos ninguna oportunidad, y que vean lo bien que nos hacen sentir las buenas acciones.



0 comentarios:

Publicar un comentario